una tarde de agosto
El sol iluminaba crepuscularmente la tarde, mientras despacio y suave iniciaba su último descenso hacia las sombras. La calidez del cielo coloreado contrastaba con la tersura de tu piel ligeramente bronceada, mojada al salir lentamente de la piscina. Incluso los delicados círculos del agua creaban remansos evocando riachuelos escondidos, lagos tranquilos en algún paraje lejano …